Una vez escuché esta frase que me marcó para siempre: Trata a los perros de la calle, como si el tuyo se perdiera y no pudiera regresar. Aplica también para gatos. Y comienzo con esta frase, porque cuando ves un perro que no sabe cruzar la calle, que está desorientado y notas lo mal que la está pasando, si crees que puedes ayudarlo y actúas, le estás dando una oportunidad de vivir.
Canela era una perra, color canela que apareció en San Martín, Municipio Libertador Caracas, ella estaba limpia, con el pelaje brillante, pero se veía muy asustada, no podía dejarla en la calle, sabiendo que la iban a atropellar en cualquier momento, pero tampoco podía tenerla en casa. Entonces, ¿qué podía hacer?
Te cuento que escribí por todos los grupos de proteccionistas y amigos que existen en mi teléfono, le perdí la pena a la gente y les preguntaba si la conocían, hablé con los vigilantes del estacionamiento de mi casa para que me la aguantaran mientras subía a buscar agua y comida, además de hacer aún más spam, con la perrita, que yo por su color de piel le decía canela, pero que no tenía ni idea de su nombre, de si había sido abandonada o si se había perdido.
Una vez más, en menos de una hora, Canela volvía a hacer aparición en todos los grupos de whatsapp, en los de la urbanización, en los de amigos, los de venta, de ahí, Canela se hizo famosa, saltó a las redes sociales y muchas organizaciones de protección animal la posteraon en sus redes, de verdad que el gremio de los animalistas es mágico. Pueden ayudar a atrapar malvados y además pueden hacer que un animalito perdido, se reencuentre con sus dueños.
Pasó una semana, Canela seguía triste, yo no quería pensar que la habían abandonado, pero tampoco veía carteles por el sector, diciendo que estaba perdida. Entonces, tenía que tomar una decisión, le doy más tiempo para que aparezcan sus dueños o la doy en adopción. La vedad, no sabía si la habían abandonado, ella se veía sana, siempre pensé, que estaba perdida.
Así la seguí posteando, enviando y me di cuenta, que ya no la compartían como antes. Entonces, tomé nuevas fotos, hice un nuevo cartel y volví a enviar de manera constante a Canela, la publiqué en varios grupos de facebook, y finalmente, eso dio sus frutos.
Una chica, me contactó y me dijo, están buscando una perrita parecida por el sector de El Cementerio. Yo pensé, el Cementerio a San Martín, es como mucho, pero igual insistí en buscar esa publicación, no la encontraba, pero entre ella y yo en los grupos a los que me había unido, vi que efectivamente, había una perrita muy parecida, pero faltaba un detalle, esta perrita no tenía el collar que dicen que tenía. Aquella perrita se llamaba Nutella, entonces, me animé a llamarla por ese nombre y la perra levantó la cabeza muy atenta.
Era Nutella, ahora me tocaba contactar a sus dueños. Menos mal, no perdí la paciencia ni la esperanza de reencotrarla con su familia. El dueño, un muchacho joven, me dijo que ella era brava, jamás me mordió, creo que ella sabía que si me mordía perdía puntos conmigo, jajaja. Ella sabía que la ayudaba, estaba muy asustada.
El chico llegó a la Plaza de la Maternidad, yo tenía a Nutella con un paseador, apenas el chico dijo en voz alta Nutella, la perrita se descontroló, lloraba y ellos no saben mentir, él era su “papá”. Conversamos y me contó que se le soltó cuando unos cohetones y fuegos artificiales empezaron a sonar mientras él la paseaba. No pudo alcanzarla, ella se asustó mucho, se desorientó y miren a donde vino a parar.
Entonces, si encuentras un perro o un gato, toma una foto y compártela, indica la localidad, la ciudad y los teléfonos de contacto, si no resulta, toma otras fotos, más fotos y cambia el cartel, refréscalo. Coloca el sitio donde te encontraste a ese perrito a gatico y compártelo. Grupos de Facebook, de WhatsApp, Telegram, Twitter, compártelo, no pierdas la fe. Y si te parece que ese animalito, necesita es un hogar, haz lo mismo, pero colocando, que busca un hogar, en adopción, busca una familia, compártelo y busca que muchos lo vean. Lo ideal, es apoyarse en los grupos especializados de animalistas, que tienen redes de contactos.
Si puedes ayudarlos, no dejes de hacerlo. Canela-Nutella, tuvo un final feliz, no siempre es así, pero podemos ayudar, hagamos el intento, hagamos nuestra buena acción del día y salva vidas, para que no mueran en la calle. Recuerda, trata a los perritos de la calle, como si el tuyo se perdiera y no pudiera regresar.
